Existe un mito muy extendido sobre los videojuegos que afirma que merman las capacidades cognitivas y provocan mayores niveles de violencia en las personas. Sin embargo, decenas de estudios han demostrado en las últimas décadas que, en realidad, son muchos los beneficios de los videojuegos para el cerebro.
Al igual que otras formas de tecnología, los videojuegos pueden llegar a generar adicción a la tecnología y dependencia, especialmente en niños y jóvenes. No obstante, un uso responsable y moderado de los videojuegos puede revertir en una mejor salud intelectual.
¿Cuáles son los beneficios de los videojuegos en el cerebro?
La popularización de los videojuegos en los últimos años ha permitido demostrar que su disfrute provoca cambios estructurales en el cerebro. Se ha detectado cómo algunas regiones aumentaron de tamaño y otras modificaciones funcionales. Cuatro de estos cambios son:
- Mejora de la atención: las partes del cerebro responsables de la atención funcionan de una forma más eficiente en personas que juegan a videojuegos. Esto significa que son capaces de mantenerse concentrados en tareas exigentes.
- Optimización de las habilidades visoespaciales: los jugadores tienen más facilidad para representar, analizar y manipular objetos mentalmente. Es decir, son más capaces de orientarse en entornos nuevos, interpretar mapas y realizar cálculos mentales más rápido.
- Mejora de la capacidad de toma de decisiones: quienes juegan a videojuegos retienen y manipulan la información necesaria para tomar decisiones en menos tiempo.
- Rapidez para procesar la información: esto les permite a los jugadores incrementar su capacidad para hacer varias cosas a la vez. Además, pueden reaccionar ágilmente en situaciones estresantes.
Consejos para jugar a videojuegos con responsabilidad
Pese a que los beneficios intelectuales de los videojuegos son atrayentes, no hay que olvidar que muchas veces, esta práctica conlleva, por ejemplo, un alto nivel de sedentarismo. Por tanto, es recomendable seguir estos consejos para tener un cuerpo y mente saludables mientras se juega:
- Moderar el tiempo de juego: en general, se aconseja no pasar demasiadas horas seguidas jugando. Algunas recomendaciones apuntan a que, por cada hora de juego, se debe descansar durante, al menos, cinco minutos.
- Sentarse correctamente: es fundamental que la espalda esté recta. Para ello, es necesario regular la altura de la silla para que la pantalla esté a la misma altura que los ojos. En los últimos años se han popularizado las sillas de gaming, que aportan un extra de ergonomía.
- Cuidar la vista: para evitar patologías como la fatiga visual o el ojo seco es importante ajustar el brillo de la pantalla según la luminosidad que tengamos. Descansar la vista de vez en cuando y usar lágrimas artificiales son otros trucos para mantener la visión intacta.
- Hacer ejercicios específicos: las cervicales, la nuca y el cuello son las zonas más proclives a sufrir daños con el paso del tiempo si no las cuidamos. Por tanto, ejercitar estas zonas de vez en cuando con ejercicios específicos siempre va a revertir en una mejor postura.
Aunque todavía se está investigando tanto los efectos positivos como negativos de los videojuegos en las personas, es probable que su potencial beneficioso sea un campo relevante en el futuro de esta industria.
Recuerda:
- Aunque los videojuegos siempre han tenido mala fama, existen estudios que afirman que son útiles para la salud cerebral.
- La toma ágil de decisiones, la concentración o la rapidez para procesar la información son algunos de los beneficios de jugar a videojuegos.
- Para evitar las consecuencias del sedentarismo, es importante compaginar los videojuegos con otras actividades físicas.