La coliflor es una de las hortalizas más versátiles a la hora de cocinarla, ya que se adapta a todos los platos. Por tanto, estando de temporada, quizás sea un buen momento para darle una oportunidad a este alimento.
Como sabemos, la coliflor pertenece a la familia de las coles. Además, es uno de los alimentos con menos calorías del mercado, de ahí que se suela incluir en la mayoría de dietas de adelgazamiento.
Propiedades y beneficios de la coliflor
Quizás uno de los aspectos que convierten a la coliflor en un alimento atractivo para las dietas es su bajo contenido en hidratos de carbono, así como en proteínas y grasas. Sin embargo, tiene otras propiedades interesantes:
- Fibra: al igual que en alimentos integrales, podemos encontrar una buena cantidad de fibra. Ayuda a disminuir los niveles de colesterol en sangre, por lo que su consumo contribuye a prevenir enfermedades cardiovasculares. También es un agente de control de la obesidad y del estreñimiento.
- Vitamina C: es imprescindible en el crecimiento y reparación de tejidos y, además, favorece el buen funcionamiento del sistema inmunitario.
- Vitamina K: es la responsable de la correcta construcción de los huesos y de otros tejidos. También es importante para coagular la sangre, por lo que, si no se tiene suficiente vitamina K, se podrían favorecer las hemorragias.
- Fósforo: este es otro componente importante en la formación de huesos y dientes, además de desempeñar funciones importantes para almacenar nuestra energía.
- Folato: más conocido como ácido fólico o vitamina B9, es esencial para la formación de glóbulos rojos.
- Antioxidantes: los antioxidantes son sustancias muy importantes en la prevención de enfermedades como el cáncer.
Variedades más comunes
Como ocurre en prácticamente todas las verduras y hortalizas, existen diferentes clases de coliflor. De hecho, se han clasificado más de 3.000 especies en todo el mundo. Normalmente, en el supermercado encontraremos las siguientes:
- Coliflor blanca: probablemente la más conocida. Como curiosidad, esta variedad no se cultiva con la luz directa del sol, de ahí su color blanco.
- Coliflor morada: algo más cara, llamativa debido a su color. Es algo más dulce que otras variedades.
- Coliflor verde: a diferencia de la blanca, esta sí se cultiva al sol. Su aroma es más intenso.
- Romanesco: se trata de una variedad de coliflor verde de origen italiano. Llama la atención por sus formas geométricas y su intenso color verde.
- Coliflor jaffa: conocida por tener un característico tono anaranjado.
- Coliflor cheddar: algo menos habitual en los mercados, este tipo de coliflor tiene una tonalidad amarilla.
Usos de la coliflor en la cocina
¿Has pensado en incluir un poco de coliflor en tu hamburguesa? ¿Y en colocarla en tu lasaña? Muchas personas restringen este alimento a su cocción junto a otras verduras, pero se trata de un alimento realmente adaptable a casi cualquier plato. Además, cuando no es el ingrediente principal, puede funcionar como acompañamiento.
Podemos aprovechar todas las propiedades de la coliflor incluso en la base de una pizza. Sigue estos pasos para sorprender a todo el mundo con esta receta:
- Tras precalentar el horno a 180ºC, corta los ramilletes de la coliflor. Lávalos, escúrrelos y tritúralos hasta obtener una textura granulada, como la del cuscús.
- Añade huevo, sal, hierbas y semillas al gusto, queso, sal y pimienta. Deberías obtener una masa homogénea, algo húmeda y maleable. Dale una forma fina y redondeada o rectangular.
- Hornea durante aproximadamente 20 minutos, hasta que la masa esté seca. Deja que enfríe y ahora sí: añade los ingredientes que desees para tu pizza. No te olvides del orégano.
- Hornea unos minutos más hasta que el queso comience a dorarse.
Tendrás una pizza que no dejará indiferente a nadie. Además, es una buena forma de introducir este alimento sutilmente en la dieta de aquellas personas más reacias a esta verdura.
Recuerda:
- La coliflor es un alimento versátil: se puede cocer, hornear e incluso sofreír.
- Este alimento suele incluirse en muchas dietas de adelgazamiento por su bajo contenido calórico, a la par que alto en fibra y antioxidantes.
- Existen más de 3.000 especies de coliflor en el mundo, aunque las más conocidas son la blanca, la morada, la verde y romanesco.