Las ciudades de 15 minutos son un planteamiento urbanístico que sugiere que todos los servicios esenciales deben estar accesibles en un viaje de 15 minutos a pie, en bicicleta o transporte público desde cualquier punto de la ciudad. Esta idea, promovida por el urbanista Carlos Moreno, ha ganado popularidad como una solución innovadora para los desafíos modernos de las ciudades.
En resumen, las ciudades de 15 minutos promueven la organización de las ciudades en pequeños núcleos urbanos descentralizados donde todos lo que necesitemos esté cerca. Esto incluye el trabajo, la educación, la salud, las compras, el ocio y los espacios verdes.
Beneficios de las ciudades de 15 minutos
Gracias a la cercanía de los servicios de las ciudades de 15 minutos, la implementación de este modelo de ciudad presenta diversos beneficios. Estos son algunos de ellos:
- Reducción de la contaminación: al disminuir la necesidad de utilizar vehículos motorizados, las emisiones de gases de efecto invernadero se reducen considerablemente.
- Mejora de la salud pública: fomentar el caminar y el uso de bicicletas no solo reduce la contaminación, sino que también mejora la salud física de los ciudadanos.
- Fortalecimiento de la comunidad: al tener servicios y comercios locales accesibles, se fortalece el sentido de comunidad y se promueve la interacción social.
- Impulso a la economía local: las pequeñas empresas locales se benefician de una mayor afluencia de clientes residentes en las proximidades, lo que puede revitalizar económicamente los vecindarios.
En relación a sus beneficios, es importante destacar que este modelo se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU números 3, 11 y 13. Estos corresponden al objetivo de salud y bienestar, alde ciudades y comunidades sostenibles y al de acción por el clima, respectivamente.
Algunas urbes que ya son ciudades de 15 minutos
Aunque el modelo urbanístico debe adaptarse a las particulares de cada ciudad en concreto, son varias alrededor del mundo las ya lo están adoptando con éxito:
- París, Francia: ha sido pionera en la implementación este modelo. París ha llevado a cabo varias iniciativas para reducir el tráfico, como la expansión de los carriles bici, la creación de zonas peatonales o la transformación de espacios públicos.
- Melbourne, Australia: Melbourne se ha enfocado en la creación de “barrios de 20 minutos”, una adaptación local del concepto. La ciudad ha invertido en infraestructura para bicicletas, mejorado el transporte público y fomentado el desarrollo de comercios locales en áreas suburbanas.
- Copenhague, Dinamarca: Copenhague ha sido durante mucho tiempo un modelo de planificación urbana sostenible y amigable con las bicicletas. La ciudad se ha comprometido a ser neutral en carbono para 2025.
- Barcelona, España: Barcelona ha introducido el concepto de superilles o supermanzanas, que son bloques de la ciudad donde el tráfico motorizado está restringido y se prioriza a peatones y ciclistas. Este enfoque permite crear espacios más seguros y agradables para los residentes, con acceso fácil a servicios y zonas verdes.
De cualquier forma, la implementación de las ciudades de 15 minutos repleta de desafíos. La reestructuración urbana requiere planificación y una inversión significativa en infraestructura. Además, es importante asegurar que todas las áreas de la ciudad puedan beneficiarse equitativamente de este modelo, abordando, de este modo, las posibles desigualdades existentes entre las diferentes zonas.