La obesidad es considerada una de las epidemias del siglo XXI. La OMS (Organización Mundial de la Salud) pone la diana sobre esta enfermedad y las complicaciones derivadas de esta patología, como diabetes o enfermedades cardiovasculares. ¿Qué debemos saber sobre la obesidad, epidemia del s. XXI?
Algunos datos de la OMS sobre la obesidad:
- Se ha triplicado en todo el mundo desde 1.975.
- Más de 900 millones de adultos tenían sobrepeso y, de ellos, 650 millones eran obesos, en 2.016.
- En 2.016 más de 340 millones de niños y adolescentes tenían sobrepeso y obesidad.
- La obesidad puede prevenirse.
¿Qué es la obesidad?
Se trata de una enfermedad crónica, caracterizada por una acumulación excesiva de grasa corporal que puede ser perjudicial para la salud.
Se considera que una persona es obesa cuando supera en más de un 20% su peso ideal, cuando presenta un Índice de Masa Corporal igual superior a 30 o un perímetro de cintura mayor de 102 para los hombres y de 88 para las mujeres.
La obesidad puede prevenirse y requiere un cambio en el estilo de vida de las personas.
¿Cómo tratar la obesidad?
La obesidad ha pasado a considerarse una enfermedad de tipo crónico que requiere cambios estructurales, tanto en la alimentación como en la rutina física diaria. Es necesario acudir a los profesionales médicos que tendrán como objetivo que alcancemos nuestro peso ideal para experimentar mejorías en nuestra vida cotidiana, nuestra salud y evitar complicaciones.
Las causas de la obesidad:
Las principales causas de la obesidad son el estilo de vida poco saludable, las dietas ricas en grasa y carbohidratos, el sendentarismo y problemas hormonales. Además, todas estas cuestiones pueden verse potenciadas por problemas psicológicos como el estrés y la ansiedad.
¿Cómo afrontar la obesidad?
Estos son los principales cambios que una persona obesa deberá afrontar:
- Cambios en la alimentación: Hay que evitar dietas milagro y entender que la lucha contra el sobrepeso es una carrera de fondo. Debemos reducir las calorías ingeridas, ya que si no hay déficit calórico no habrá descenso de peso. La cantidad recomendada es entre 1.500 y 1.800 para hombres y entre 1.000 y 1.200 para mujeres. Debemos introducir frutas y verduras y eliminar los fritos y bebidas azucaradas.
- Actividad física: Debemos dejar atrás la vida sedentaria y comenzar rutinas de ejercicio físico para potenciar el adelgazamiento. Se recomiendan 150 minutos por semana, que pueden ir incrementándose a medida que mejore la condición física. También debemos modificar nuestra conducta, abandonando hábitos como coger el ascensor y tomar asiento con frecuencia. En lugar de eso, optemos por subir las escaleras y permanecer de pie en trayectos y espacios de tiempo cortos.
- Ayuda psicológica: Nadie ha dicho que vaya a ser fácil. Para acabar con la obesidad tenemos que dar un giro de 180 grados a nuestra vida. Como cualquier cambio, no es aconsejable afrontarlo solos y, en caso de necesitar una ayuda emocional o psicológica extra, no debemos dudar en pedirla. La terapia siempre ayudará a sobrellevar episodios de estrés y ansiedad.
Complicaciones:
Es muy importante afrontar los cambios necesarios para llegar a nuestro peso ideal y evitar así complicaciones derivadas de la obesidad. Las que exponemos a continuación son algunas de las más graves:
- Enfermedades cardiovasculares como el infarto o la insuficiencia cardiaca.
- Complicaciones respiratorias.
- Complicaciones metabólicas como la Diabetes Mellitus tipo 2 y de tipo digestivo.
- Mayor riesgo de padecer cáncer de riñón, colon y mama.
Recuerda:
- La obesidad es considerada por muchos como la auténtica epidemia del siglo XXI.
- Para combatir la obesidad es necesario introducir cambios en la alimentación y el estilo de vida.
- Entre las complicaciones más frecuentes de la obesidad están los accidentes cardiovasculares y el desarrollo de diabetes.