Con la llegada de las vacaciones, los viajes, los cambios de rutina y no estar en casa o entorno habitual es fácil olvidarnos de algunas costumbres. Tendemos a consumir más y podemos descuidar nuestro entorno. ¿Cómo podemos tener unas vacaciones sostenibles?
Es importante siempre informarnos del lugar que vamos a visitar, sobre todo, sino es en España para tener en cuenta las leyes y las costumbres de ese sitio sobre el medioambiente.
También, a la hora de planear y escoger nuestro destino de vacaciones hay que considerar si nuestra estancia tendrá un impacto positivo o negativo sobre la comunidad local de ese sitio.
Consejos para ser más sostenibles en vacaciones:
- Para ahorrar papel, y siempre que sea posible, podemos llevar los billetes y reservas de forma electrónica en el móvil.
- Seleccionar bien lo que vamos a llevar. Es mejor viajar con pocas cosas y evitar sobrecargar los medios de transporte.
- Compartir coche para ahorrar en combustible y el impacto medioambiental.
- Uso del transporte público, siempre que sea posible. También podemos usar la bicicleta para desplazarnos, un medio respetuoso con el medioambiente.
- Si se puede, escoger el tren como medio de transporte antes que el coche o el avión ya que contamina.
- Reducir el consumo de plástico y comida demasiado envasada que, además, contiene más aditivos.
- No realizar actividades que impliquen distorsionar las prácticas cotidianas de los animales.
- Respetar el entorno en el que nos encontramos sin alterarlo y siempre recogiendo los desperdicios que generamos.
- Si escogemos un destino con playa, asegurarnos que no dejamos basura o desperdicios como colillas.
- Si decidimos escoger un destino natural, como una montaña o bosque, recordar el alto riesgo de incendios y evitar tirar cualquier cosa al suelo que pueda provocarlos.
Recuerda:
- Las vacaciones de verano suelen ser una época en la que nos olvidamos de nuestras rutinas diarias.
- Aunque estemos de vacaciones no podemos olvidar el respeto y cuidado hacia nuestro entorno.
- Siempre debemos respetar el sitio que visitamos cuidándolo y no produciendo desechos que lo alteren.