¿Te has preguntado alguna vez porque nos pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo? No está claro todavía porqué, pero sí sabemos que dormir es importante para la salud y que afecta directamente a la atención, la memoria, la actividad y al bienestar. Y no solo es importante la cantidad de sueño, la calidad también es importante. ¿Quieres conocer más sobre el sueño? No te pierdas esta guía básica sobre el sueño.
¿Qué pasa cuando dormimos?
En las horas de sueño suceden un gran número de procesos internos que regeneran nuestro cuerpo y lo preparan para el día siguiente. Por eso, descansar entre 7 y 9 horas cada día se relaciona con este ritmo del organismo.
Si te has preguntado alguna vez qué ocurre mientras dormimos, esto es lo que sucede. El sueño tiene diferentes fases, que se van repitiendo durante la noche:
- Adormecimiento: aproximadamente de diez minutos.
- Sueño ligero: los músculos del cuerpo se relajan, la presión arterial y la frecuencia cardíaca descienden, al igual que la respiratoria, y baja la actividad cerebral.
- Sueño profundo: el ritmo de las ondas cerebrales es muy lento y los músculos reciben los nutrientes necesarios para repararse.
- REM: en esta fase se presenta la mayor actividad cerebral y mayor relajación muscular. Es donde se producen los sueños que sí se recuerdan.
También es importante conocer que, a lo largo de nuestra vida, no dormimos igual. ¿Cuánto se debe dormir en cada edad vital?
¿Cuáles son los beneficios de dormir?
Nuestros hábitos de sueño han ido cambiando a lo largo de los años, pero hay que enfocarse en la necesidad de dormir bien para la salud de nuestro cuerpo y mente. Los beneficios del sueño van mucho más allá de los puramente físicos. Éstos son algunos de ellos:
- Ayuda a perder peso: la falta de sueño se asocia a la obesidad, porque hace que los adipocitos, células grasas, produzcan menos leptina, hormona que suprime el apetito.
- Mejora nuestro sistema inmune: dormir ayuda a que nuestro sistema inmunitario se regenere y estemos más fuertes ante toxinas, gérmenes o infecciones.
- Desarrolla la memoria y la creatividad: mientras dormimos, se fortalecen las conexiones neuronales. Durante la fase REM, el hipocampo se restaura y transforma la memoria a corto plazo en memoria a largo plazo.
- Protege el corazón: la falta de sueño aumenta las hormonas del estrés, aumenta la presión arterial y con esto la frecuencia cardíaca.
- Mejora el estado de ánimo: cuando dormimos, nos relajamos, y eso produce más melanina y serotonina con lo que contrarrestamos el estrés.
Las condiciones perfectas para dormir bien
Hay que procurar tener una buena calidad de sueño, ¿cómo podemos lograrlo? Pues hay una serie de cosas que podemos hacer para que se den las condiciones perfectas para dormir bien:
- Fija un horario de sueño.
- Acondiciona la habitación: acogedora, aislada del ruido y la luz, y que solo sea para dormir. La ropa de cama, el orden y la limpieza también son importantes.
- Temperatura ambiente debe estar entre 18 y 21 ºC.
- No uses dispositivos electrónicos antes de dormir. La luz que emiten retrasa el inicio del sueño.
- Realiza actividad física durante el día.
- Cuida la alimentación y la hidratación.
- Es fundamental olvidar el estrés para dormir bien.
- Crea una rutina que te ayude a conciliar el sueño.
Estos consejos para dormir bien, los debes ir implementando poco a poco, pero sin pausa ya que te ayudarán a dormir mejor para estar activo y al 100% al día siguiente.
¡Y no te olvides de la siesta! 20 minutos son suficientes para notar los beneficios de la siesta en nuestro cuerpo y mente. Pero una buena siesta también requiere tres requisitos indispensables: que sea necesaria, que no sea sustitutiva del sueño necesario y que se haga en un sitio de calidad.
Trastornos del sueño
Ya hemos visto cómo el sueño afecta a nuestra salud y bienestar y qué debemos hacer para tener un sueño de calidad. ¿Pero qué le pasa a nuestro cuerpo cuando no descansamos?
- Provoca falta de atención e irritabilidad: el sueño es importante para la memoria, la atención, la capacidad de resolver problemas, etc. Si no descansamos estaremos más irascibles, irritables y frustrados.
- Falta de concentración y aprendizaje.
- Fatiga y cansancio.
Además de todo esto, dormir mal también se relaciona con la hipertensión, enfermedades coronarias y obesidad, entre otras. Otros trastornos relacionados con el sueño son la apnea o las pesadillas, la parálisis del sueño y los terrores nocturnos, más habituales en los pequeños. Trabajar por turnos también puede añadir un problema a nuestro sueño, pero puedes seguir estos consejos para mejorar la situación.
Recuerda:
- Dormir es importante para la salud ya que afecta directamente a la atención, la memoria, la actividad y al bienestar.
- Algunos beneficios del sueño son: regenera el sistema inmune, ayuda a perder peso, protege el corazón y mejora nuestro estado de ánimo.
- Hay condiciones que favorecen un buen sueño: rutina horaria, temperatura entra 18 y 21 grados, una habitación acondicionada para dormir, cuidar la alimentación y realizar deporte.
- La falta de sueño provoca una serie de problemas físicos y psicológicos, además de estar relacionada con enfermedades como la hipertensión o problemas coronarios.