La vuelta al cole se acerca, marcando el final de las vacaciones y el inicio de una nueva etapa llena de aprendizaje y experiencias. Aunque este periodo puede generar cierto estrés tanto en los padres como en los niños, existen algunas estrategias simples que pueden convertir esta transición en un proceso más llevadero.
Calcula bien los tiempos
El primer día de colegio puede convertirse en un torbellino de prisas si no se planifica adecuadamente. En lugar de dejar todas las tareas para el último momento, crea una “cuenta atrás” desde la noche anterior. Prepara la mochila, selecciona la ropa y coloca todo lo necesario en un lugar accesible.
De esta manera, las mañanas serán mucho más tranquilas y podrás disfrutar de un inicio de día sin tensiones.
Favorece la rutina antes de la vuelta al cole
La rutina es el mejor aliado para afrontar la vuelta al cole sin sobresaltos. Algunos días antes de que comience el colegio, acostumbra a tus hijos a irse a la cama y despertarse a la hora que lo harían durante el curso.
Además, realizar las actividades cotidianas como vestirse, desayunar y lavarse los dientes en el orden en que se realizarían durante un día de colegio, ayuda a restablecer la rutina y facilita la adaptación al horario escolar.
Ten todos los materiales preparados
La mayoría de los colegios proporcionan una lista de materiales necesarios para el próximo curso. En caso de que no lo hiciera, no dudes en contactar con el colegio para que te oriente en este aspecto.
En cualquier caso, evita el estrés de última hora adquiriendo estos materiales con antelación. Se recomienda enormemente involucrar a los niños a la hora de elegir el material. Este proceso no solo ayuda a prepararse, sino que también genera emoción por el nuevo curso.
Motiva a los niños
Al igual que los adultos pueden sentir cierta melancolía después de las vacaciones, los niños también pueden experimentar lo que se conoce como síndrome posvacacional.
Motívalos hablando sobre momentos felices de cursos anteriores o las actividades extracurriculares que les esperan. Recordar los momentos divertidos y las amistades previas puede aumentar su entusiasmo por la vuelta al cole.
Implícales en los preparativos para la vuelta al cole
La organización para la vuelta al cole no es tarea exclusiva de los padres. Involucrar a los niños en los preparativos les inculca el sentido de responsabilidad. Permíteles elegir su ropa, hacer la mochila y llevar a cabo otras tareas propias de la rutina. Todo ello revierte en un refuerzo de su independencia.
Por supuesto, recuerda que los padres también son parte integral de este proceso, y por eso mantener una actitud positiva y de apoyo son esenciales para que los niños se adapten fácilmente para el nuevo curso escolar.