Con estos calurosos días de verano nuestras necesidades alimenticias cambian e instintivamente buscamos comidas que nos refresquen y que nos ayuden a regular nuestra temperatura corporal. Por ello, durante la época estival, nos apetece consumir una mayor cantidad de alimentos fríos como frutas o helados. Pero, ¿cómo saber cuáles son los mejores alimentos para esta época del año?
A continuación te recomendamos cuatro tipos ideales para consumir durante los meses de verano:
- Frutas: estos alimentos son una de las mejores opciones para cuidarse en verano. La sandía o el melón son dos de las frutas estrella para esta temporada del año ya que, además de refrescar el organismo, son buenas para cuidar la línea. Por otro lado están las frutas hipercalóricas, como el plátano y la uva, y que lo mejor es comerlas en pocas proporciones.
- Verduras: son fáciles de preparar y nos proporcionan vitamina C, fibra y sales minerales, esenciales para el organismo. Entre los platos más recurridos del verano se encuentran las ensaladas (que podemos combinarlas con pasta), las cremas de verduras o el tan conocido gazpacho andaluz. El consumo de verduras sacia el hambre y la sed, contribuye a mejorar la digestión, protege nuestra piel y cuida el corazón. Además, en su mayoría, tienen componentes détox que nos ayudan a depurar el organismo e, incluso, muchas de ellas tienen propiedades antioxidantes.
- Legumbres: por su valor nutricional es recomendable consumirlas hasta tres veces por semana, pero con este calor un puchero no es la mejor opción. Por eso, es recomendable adaptarlas a recetas frías como las ensaladas o en puré como el hummus. Estas recetas pueden ser una sencilla alternativa para su consumo. También son ricas en fibra, antioxidantes, proteínas vegetales, hidratos de carbono y ¡son bajas en grasas!
- Helados: son reyes del verano y tomados con moderación, son altamente saludables por ser ricos en proteínas, vitamina B, calcio y ácido fólico. Existen muchas alternativas para disfrutar de ellos, si te preocupa el control de peso puedes decantarte por helados desnatados o bajo en calorías. Si eres celíaco, hoy día hay muchas marcas que los fabrican sin gluten.
3 consejos prácticos para consumir alimentos fríos en verano
Además de consumir alimentos que nos ayudan a sobrellevar el calor del verano, es importante saber cómo hacerlo, ya que el consumo de alimentos fríos ralentiza nuestro proceso de digestión.
Nuestra primera recomendación es ordenar los platos de más fríos a más calientes y dejar un descanso antes de tomarnos el postre. De esta manera, ayudaremos a mejorar nuestra digestión.
Además, la peor hora del día para consumir alimentos fríos es durante la cena, ya que nuestro cuerpo ralentiza su metabolismo a la hora de dormir.
Por último, en cuestión de líquidos es importante beber de forma frecuente, pero evita las bebidas muy frías cuando estés tomando el sol o haciendo deporte, ya que el contraste de temperaturas en nuestro organismo puede ser perjudicial para nuestra salud.
¡Ahora a disfrutar del verano con las comidas más refrescantes!