El kiwi es una fruta de temporada característica por su apariencia exterior, su intenso verde interior y también por su sabor, que combina matices dulces y cítricos. En España no se empezó a consumir hasta los años 80, ya que hasta entonces era una fruta propia de zonas como Nueva Zelanda. Y es que fue en esa época cuando se comprobó que el cultivo de kiwi era viable en la zona norte de nuestro país.
Es importante recordar que el kiwi es una fruta que puede provocar alergias en algunas personas. Por este motivo es importante evitar su consumo en niños menores de 1 año, especialmente si ya ha mostrado indicios de padecer otras alergias.
Beneficios y propiedades del kiwi
Conocido por su efecto laxante, la mayor parte del contenido del kiwi es agua y, su aporte calórico es moderado debido a su cantidad de hidratos de carbono. Estas son sus 3 principales propiedades:
- Vitamina C: una pieza de kiwi contiene el doble de vitamina C que una naranja. Entre sus muchas funciones, la vitamina C es responsable de estimular el sistema inmunitario.
- Ácido fólico: por cada 100 gramos de kiwi hay 32 miligramos de ácido fólico. Esta hormona es clave en nuestro correcto desarrollo celular, tanto de los tejidos como de la sangre.
- Fibra soluble: su conocido efecto laxante se debe a su alto contenido en fibra soluble.
Además, una pieza de esta fruta también contiene minerales relevantes para la salud, como el potasio, el magnesio y el fósforo.
Fondue de chocolate con kiwi, un postre diferente
La fondue de chocolate es uno de los postres más atractivos que existen, a la par que sencillo. Es por ello que suele ser el protagonista de fiestas y eventos, si bien puede tener su lugar en cualquier postre. Si a la fondue le sumamos una fruta como es el kiwi, puedes obtener el postre perfecto, especialmente, cuando hay reacios a los cítricos en la mesa. Sigue estos 3 pasos para conseguirlo:
- En una cazuela, mezcla leche, nata y sal. Cuando comience a hervir, añade chocolate en pequeños trozos.
- Mientras esperas a que se haga el chocolate, pela los kiwis y trocéalos. Recuerda que estos trozos no deben ser demasiado pequeños, y serán más manejables si los cortas en tiras.
- Una vez tengas el chocolate listo, retíralo del fuego y sírvelo.
De este modo, obtendrás un postre diferente, al tiempo que introduces el kiwi en la dieta.
Existe un plato típico muy específico para la cena de Nochevieja japonesa. Se llama toshikoshi-soba, y son unos fideos finos de trigo que se sirven en un plato de caldo que lleva varios ingredientes, entre ellos, salsa de soja y bonito.
También es costumbre que durante las primeras horas del año nuevo se acuda a un templo o santuario para rezar. El objetivo es atraer la buena suerte para los siguientes 12 meses.