Todos alguna vez en nuestra vida hemos sufrido dolor de espalda, ya sea por el estrés, o bien, por no mantener una buena higiene postural, y es que este es uno de los problemas médicos más comunes en la sociedad. Está claro que la aparición de esta dolencia se debe a que mantenemos hábitos inadecuados que cargan la espalda y nos provocan tensión muscular.
Esta molestia resulta difícil de sobrellevar en nuestro día a día, pero, ¿por qué nos duele la espalda? Las causas son diversas, desde la desviación de la columna a una mala postura causada por estrés, o incluso, por encontramos dentro de los grupos de riesgo como: embarazadas, fumadores o personas mayores. A continuación, te proponemos algunas acciones para que las incluyas entre tus actividades diarias y que te ayudarán a combatir esta dolencia. Tu salud lo agradecerá.
- Manten una dieta equilibrada. Es importante que elimines de tu dieta las grasas saturadas, las transgénicas y los alimentos procesados, que están vinculados con el sobrepeso. En cambio, tu espalda te agradecerá consumir alimentos ricos en magnesio que ayuda al metabolismo de los huesos (arroz integral, frambuesas o trigo), en cobre para fortalecer nuestros huesos (legumbres, chocolate o hígado) y en calcio (yogures, guisantes o salmón).
- Toma el sol todos los días. La vitamina D es una de las principales ayudas para fortalecer el sistema óseo, y aunque se encuentra en algunos alimentos como los huevos o los lácteos, también la produce la piel cuando está expuesta al sol. Así que es hora de aprovechar el buen tiempo para salir a pasear o tomar el sol, eso sí, siempre con una protección solar adecuada.
- Estira tu cuerpo. Es recomendable realizar una serie de ejercicios de estiramiento para aliviar y reforzar la espalda, además de ser muy sencillos, no te quitarán casi tiempo. También puedes realizar deportes como la natación, excelente para robustecer el cuello y la espalda, así como superar o prevenir lesiones que puedan producir dolor.
- Corrige la postura. Es importante que aprendas a llevar a cabo hábitos posturales correctos. La columna sufre al mantener la misma posición durante mucho tiempo, si se realizan movimientos que aumenten sus curvas fisiológicas o también si se hacen grandes esfuerzos. Existen tres posturas que te ayudarán a mejorar la salud postural: en primer lugar, mantener la cabeza y el tórax erguidos mientras caminas; si vas a pasar mucho tiempo de pie lo mejor es que se adelante uno de los pies y se vaya cambiando la posición, y por último, al agacharte a recoger algo, es mejor flexionar las rodillas y mantener recta la espalda.
- Hazte con un buen colchón. Lo normal es dormir entre seis y ocho horas diarias, tiempo en el que la espalda descansa, por lo que es muy importante elegir un buen colchón y una buena almohada. Lo mejor suele ser optar por un colchón suave y flexible que se amolde perfectamente a los contornos del cuerpo.
Si el dolor de espalda perdura o se vuelve más agudo es importante acudir al médico para que realice un diagnóstico y unas pautas a seguir. Cuidar de la salud de la espalda es imprescindible para mantener un buen bienestar físico y psicosocial. ¡Es momento de cuidar tu espalda y de mantener una correcta higiene postural!