Uno de los imprescindibles que los futuros padres deben tener preparado con tiempo es la maleta para dar a luz. Una maleta que ilusiona mucho hacer, especialmente porque en ella no solo se ha incluir todo lo que necesitan las futuras mamás, también hay que disponer todo lo que va a precisar el bebé. Pero, ¿cómo preparar la maleta perfecta para dar a luz en el hospital?
¿Cuándo hay que tener preparada la maleta para dar a luz?
Las matronas suelen mantener informadas a las futuras madres sobre cuándo y cómo han de preparar la bolsa de maternidad, pero es una tarea que se puede ir haciendo poco a poco y adquirir todo lo que se necesita con antelación por si acaso el parto se adelanta.
Y es que la previsión es una de las palabras clave de los meses de embarazo. Todo ha de estar preparado con tiempo y, en el caso de la maleta para dar a luz, los expertos aconsejan tenerla ya dispuesta unas tres semanas antes de la fecha señalada para el parto (alrededor de la semana 37 de embarazo). El objetivo último es no perder tiempo a última hora y que, cuando llegue el momento, solo tengamos que coger la maleta y salir hacia el hospital. Además, durante la última semana del embarazo es habitual que los nervios y el cansancio se adueñen de las embarazadas y estas necesiten tener todos los preparativos bajo control.
¿Qué artículos hay que incluir en la maleta perfecta para dar a luz?
A la hora de preparar la maleta para dar a la luz no solo es importante hacer un listado de todo lo que necesitan la madre y el bebé, sino también es conveniente preparar toda la documentación que se requerirá para que la atención en el centro sanitario se desarrolle de forma efectiva.
En los hospitales públicos suelen proporcionar muchos de los artículos de primera necesidad (compresas, camisón, toallas, etcétera) tanto para las madres como para los recién nacidos, pero siempre se recomienda llevar cosas personales como:
- Un par de sujetadores de lactancia: aunque es posible que las enfermeras te asesoren en las primeras tomas, puede ser interesante contar con unas pezoneras o un sacaleches si es necesario.
- Neceser con productos de higiene como cepillo y pasta de dientes, jabón, desodorante, un cepillo para el pelo o un peine, toallitas húmedas, champú en seco, crema para las grietas en los pezones, crema hidratante, etc.
- Por si no te sientes a gusto con los camisones del hospital puedes llevar algún camisón, siempre abierto por delante para poder dar el pecho. Hay que tener en cuenta que la ropa de cama se mancha mucho y es preciso cambiarse con frecuencia.
- Una ropa limpia para la vuelta a casa. La de ingreso suele quedar manchada si se rompe aguas antes de ir al hospital o en algún momento mientras se llega al hospital.
¿Cómo preparar la bolsa del bebé para el hospital?
Al igual que las mamás, el hospital público suele proporcionar pañales, leche, biberones y todo lo necesario para vestir, asear y cuidar al bebé. No obstante, se puede meter en la maleta para dar a luz:
- Una toquilla o una mantita para cubrir al pequeño a la salida del hospital.
- Bodies y pijamas de algodón.
- Patucos o calcetines.
- Un gorrito.
- Un neceser con toallitas húmedas suaves para limpiar al bebé, pomada para evitar que se le irrite el culito, toalla de algodón, etcétera.
La documentación, otro elemento imprescindible de la maleta del parto
Entre los documentos que se deben incluir en la maleta para dar a luz en el hospital se encuentran los siguientes:
- La tarjeta de la Seguridad Social.
- La cartilla del embarazo.
- El grupo sanguíneo en una tarjeta o anotada en la cartilla de embarazo.
- Los análisis y pruebas médicas que se han hecho durante el embarazo.
- El DNI y el Libro de Familia para la posterior inscripción del recién nacido en el Registro Civil.
Recuerda:
- Es aconsejable tener preparada la maleta para dar a luz unas tres semanas antes de la fecha prevista para dar el parto o la cesárea.
- La maleta ha de incluir todo lo que se considere imprescindible para la madre, el bebé y la persona acompañante.
- También es preciso llevar en esa maleta toda la documentación necesaria para el parto y la posterior inscripción del bebé en el Registro civil.