¡Se acerca la “vuelta al cole”! La literal, la vuelta a la rutina de los más pequeños de la casa. Teniendo en cuenta que los niños pasan la mayor parte del día en el colegio, trabajar con ellos el regreso de manera positiva es fundamental:
- Volver a la rutina de manera progresiva.
- Animarles con el reencuentro con amigos, profesores, etc.
- Reforzar sus puntos fuertes y los logros del curso anterior.
- Animarles a conseguir nuevos retos.
- Hacer planes juntos o establecer horarios para jugar.
La vuelta al colegio puede ser una buena oportunidad para trabajar con ellos las bases de un estilo de vida saludable que les acompañen siempre. De esto saben mucho las madres.
7 consejos para tener buena salud en el cole
Los niños pasan la mayor parte de su día en el colegio. Y volver también es un reto para su salud, porque se encontrarán de nuevo con compañeros menos agradables: infecciones, piojos, etc.
¿Qué podemos hacer para que tengan un año saludable en el cole?
- Desayuno equilibrado: la fruta, los cereales y los lácteos conforman una excelente manera de comenzar el día. Y para el recreo mucho mejor una pieza de fruta, un sándwich o un yogur batido. Así evitamos problemas como la obesidad infantil.
- Buena higiene: lo más sencillo es animarles a que se laven las manos antes de comer y después de ir al servicio. Hacerlo de manera divertida, como cantando, a través de un cuento o juntos, les motivará mucho más.
- Ojo con los piojos: es bueno explicarles qué son y recomendarles que no compartan peines, cepillos o sombreros con otros niños. Es importante también revisar sus cabezas durante el periodo escolar, sobre todo si observamos que se rascan demasiado.
- Cepillarse los dientes: los dulces o la falta de falta de higiene bucal pueden dañar los dientes y que aparezcan las caries. Enseñarles a cepillarse bien los dientes, incluso después de comer en el colegio, es fundamental.
- Una espalda sana: lo más recomendable es usar mochilas de ruedas para evitar lesiones futuras, el peso recomendable no debe superar el 10% del peso de nuestros hijos.
- La visión: los problemas de la vista pueden estar detrás del fracaso escolar. Si notamos que nuestro hijo se acerca mucho a los libros o que entorna los ojos al ver el encerado, lo mejor es una visita al oftalmólogo.
Y, por último, lo más aconsejable es una revisión rutinaria en el médico antes de comenzar la escuela, lo que podría ahorrarnos algún disgusto.
La espalda: una cuestión de peso
En la actualidad, el 51% de los chicos y el 69% de las chicas sufren dolor de espalda entre los 13 y los 15 años. Y esto aumenta el riesgo de padecer dolencias en la espalda de forma crónica cuando sean adultos.
Para tomar conciencia se ha publicado una nueva edición del Tebeo de la Espalda_2017, que este año viene acompañado de una aplicación interactiva con realidad aumentada que se puede descargar de manera gratuita y donde los niños pueden aprender, divirtiéndose, con los consejos para cuidar su espalda.
Además, el doctor Francisco Kovacs, director de la Red Española de Investigadores en Dolencias de la Espalda y de la Unidad de la Espalda Kovacs del Hospital Universitario HLA-Moncloa nos da unas claves para que nuestros hijos tengan una espalda sana:
- Realizar actividad física de manera habitual.
- Si aparece el dolor evitar el reposo completo y realizar el grado de actividad que permita el dolor.
- Reducir el peso de las mochilas y llevarla correctamente:
- Si es de ruedas mucho mejor.
- Si no lo es: llevarla sobre los dos hombros, que no se bambolee y que coincida con el centro de gravedad de los niños, más hacia la zona lumbar, más bajo que en los adultos.
Recuerda:
- La época del colegio es una de las más importantes para el desarrollo de nuestros hijos, así que enseñarles unos hábitos saludables correctos les ayudará a crecer fuertes y con unas costumbres sanas.
- Piojos, gripes, caries… Pueden solucionarse con rutinas tan sencillas como lavarse bien las manos y los dientes y enseñándoles a no compartir peines.
- Es importante cuidar la espalda de los más pequeños para evitar dolencias en la etapa adulta: hacer ejercicio y cuidar el peso de la mochila, son fundamentales.