¿Es normal el crujido en las rodillas?

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Las rodillas son articulaciones clave en nuestro cuerpo, ya que soportan su peso, nos estabilizan y nos permiten movernos de un lado a otro. También son unas de las que más sufren el impacto de la actividad diaria, y en este sentido resulta muy común oír hablar sobre el crujido en las rodillas, también conocido como crepitación o chasquidos articulares.

Estos crujidos son los sonidos que se producen cuando se mueve la articulación y, frente a la creencia popular, suelen ser bastante comunes y no siempre son sinónimo de problemas.

Posibles causas del crujido en las rodillas

El crujido en las rodillas puede deberse a diversas causas, la mayoría de las veces, benignas. De tal forma que existen 2 motivos exentos de gravedad que pueden causar estas crepitaciones:

  1. Burbujas de aire en el líquido sinovial: estelíquido es el encargado de lubricar las articulaciones. Puede contener pequeñas burbujas de gas que estallan al mover la rodilla, generando este sonido.
  2. Movimiento de tendones o ligamentos: a veces, los tejidos que rodean la articulación se desplazan ligeramente y regresan a su posición original, produciendo un chasquido sin relación con ningún daño estructural.

Sin embargo, el crujido en las rodillas también puede estar asociado a problemas más serios, asociados con la degeneración o algunas lesiones. Estos pueden ser algunos de ellos:

  • Desgaste del cartílago (artrosis): la pérdida progresiva de cartílago genera fricción entre los huesos, provocando chasquidos acompañados de dolor o rigidez. La artrosis es una de las enfermedades reumatológicas más frecuentes, y solo en España afecta a en torno al 10% de la población.
  • Lesiones meniscales: los daños en el menisco pueden causar crujidos dolorosos y limitar el movimiento de la articulación.
  • Síndrome de dolor patelofemoral: relacionado con el mal alineamiento de la rótula, produce fricción y molestias al mover la articulación.
  • Artritis: especialmente en osteoartritis y artritis reumatoide, los pacientes suelen presentar crujidos debido al daño en el cartílago.

En cualquier caso, es importante consultar a un médico si los chasquidos están acompañados de dolor o inflamación, si se percibe rigidez o sensación de inestabilidad o, también, si los crujidos se vuelven persistentes o empeoran con el tiempo.

Tratamientos del crujido en las rodillas

En el caso de que los sonidos sean de carácter anómalo, los especialistas deben realizar un diagnóstico y establecer un plan de tratamiento coherente para que aborde el problema. Según el diagnóstico, podrían sugerir las siguientes opciones de tratamiento:

  • Ejercicios de fortalecimiento: se trata de ejercicios orientados a mejorar la musculatura de la pierna, lo que ayuda a estabilizar la rodilla.
  • Control del peso: el ritmo de desgaste articular se puede reducir al disminuir la carga que deben soportar nuestras rodillas.
  • Terapia farmacológica: existen algunos tratamientos, como los antiinflamatorios, las infiltraciones de ácido hialurónico o el plasma rico en plaquetas, que pueden ayudar en ciertos casos de crujido en las rodillas. Estos deben emplearse siempre bajo prescripción médica.

En cualquier caso, es fundamental evitar el sedentarismo y adoptar un estilo de vida activo a través de la práctica de deportes de bajo impacto y siempre con calzado adecuado. Estas medidas contribuyen a mantener unas las rodillas saludables y funcionales, además de reducir el riesgo de lesiones articulares a largo plazo.

Recuerda

El crujido en las rodillas puede deberse a diversas causas, la mayoría de las veces, benignas.
Es importante consultar a un médico si los chasquidos están acompañados de otros síntomas como dolor, inflamación o rigidez.
El traumatólogo es el especialista encargado de evaluar la causa que provoca el crujido de las rodillas.