A la hora de tratar determinadas dolencias o lesiones es posible que sea necesario el trabajo conjunto de dos profesionales de áreas distintas. En muchas ocasiones, podólogo y fisioterapeuta trabajan conjuntamente para intentar ayudar a resolver los problemas físicos de los pacientes. La colaboración de estos dos especialistas en materia de salud es necesaria para mejorar la recuperación de aquellas personas con lesiones o problemas en los pies.
¿Cuál es la función de la fisioterapia y la podología?
La fisioterapia es una disciplina de la salud que, siendo una alternativa terapéutica no farmacológica, trata y previene lesiones y enfermedades de forma eficaz y sin efectos secundarios. Esta técnica se utiliza sobre todo en lesiones musculares, articulares, tendinosas, óseas o reumáticas.
Por otro lado, la podología se centra en prevenir, diagnosticar y tratar todas aquellas patologías o lesiones que afectan a nuestros pies, como pueden ser infecciones por hongos, encarnación de las uñas, problemas de sudoración excesiva, o el pie de atleta, que es una infección por hongos muy frecuente y en muchos casos bastante rebelde.
¿Cuándo es conveniente que trabajen juntos el podólogo y el fisioterapeuta?
El tándem podólogo-fisioterapeuta es especialmente necesario a la hora de tratar determinadas afecciones como pueden ser la fascitis plantar o la pubalgia.
- La fascitis plantar es un problema bastante habitual que se produce por la inflamación de una banda de tejido elástico que va desde el calcáneo hasta la zona metatarsal. Esta patología es muy frecuente en las consultas de fisioterapia, ya que se realiza una revisión de las articulaciones y estructuras afectadas. Pero lo cierto es que, el diagnóstico y tratamiento será mucho más completo y acertado si también contamos con la visión de un podólogo.
- La pubalgia es una serie de lesiones que afectan a diferentes grupos musculares de la zona inguinal y que se manifiestan con dolor en la zona del pubis. Este tipo de afecciones se presentan de forma muy frecuente entre los futbolistas. Ante una pubalgia, se suele recurrir al fisioterapeuta, que entre otras medidas, trata la lesión con masoterapia y ejercicios de fortalecimiento. No obstante, en este tipo de lesiones es posible que exista un problema a la hora de apoyar el pie, y por lo tanto es conveniente pedir la opinión de un podólogo para que se encargue de realizar una valoración más exhaustiva.
Por estos motivos, es conveniente que el podólogo y el fisioterapeuta trabajen en equipo en determinadas circunstancias. Complementando y combinando los conocimientos de ambos profesionales se aplicará el mejor tratamiento posible para el paciente.
Recuerda:
- La colaboración del fisioterapeuta y el podólogo es necesaria para ayudar a una mejor recuperación de aquellas personas con lesiones o problemas en los pies
- Este tándem es especialmente necesario a la hora de tratar afecciones como la fascitis plantar o la pubalgia