Las muelas del juicio son las piezas dentales que aparecen al fondo de la boca, habitualmente entre los 17 y los 21 años. Se les conoce de esta manera porque nacen en la edad adulta, es decir, cuando se considera que “tenemos juicio”. También se les conoce como tercer molar o cordales.
Pueden existir hasta 4 muelas del juicio, y se sitúan en las esquinas posteriores de la boca. En muchos casos, estas nunca llegan a salir. Pero en otras personas, su aparición puede causar importantes molestias.
Síntomas de las muelas del juicio
Las muelas del juicio pueden aparecer de 3 formas:
- Salir sin problemas: si hay espacio suficiente en la cavidad bucal, saldrán y formarán parte de la dentadura.
- No salir: por motivos evolutivos, las muelas del juicio ya no son imprescindibles para nuestra supervivencia. Por tanto, en algunas personas, estas no erupcionan y quedan retenidas.
- Salir parcialmente: en algunas personas, las muelas del juicio salen, pero no del todo. Es lo que se conoce como erupción o retención parcial.
Tanto en la retención parcial como en la total, las muelas pueden estar naciendo en ángulos erróneos o creciendo de modo que empuja al resto de la dentadura. Esto puede causar dolor e infecciones, además de los siguientes síntomas:
- Sensibilidad, sangrado, enrojecimiento e hinchazón de las encías.
- Mal aliento.
- Dificultad para abrir la boca.
- Mandíbula dolorida e hinchada.
En estos casos, lo más recomendable es acudir al odontólogo para que haga una valoración sobre los posibles pasos a seguir.
¿Cuándo es necesario extraerlas?
En muchas ocasiones, los odontólogos y los cirujanos maxilofaciales recomiendan su extracción. Esto es habitual cuando:
- Están causando dolor en el paciente.
- Se están dando infecciones reiteradamente.
- Aparecen caries en las muelas del juicio, o en los dientes colindantes.
- Si el espacio para que la muela salga es insuficiente y está empujando al resto de la dentadura.
La extracción de los cordales se realiza habitualmente bajo anestesia local. Tras el procedimiento, se suele recomendar a los pacientes:
- Controlar el dolor con analgésicos y la aplicación de frío.
- Evitar actividades intensas durante una semana.
- Beber mucha agua.
- Comer alimentos blandos, como los yogures.
Atiende a las recomendaciones del especialista sobre la higiene bucal que deberás mantener en las siguientes semanas. Además, si tienes puntos, es posible que debas programar una cita médica para retirarlos.