5 países asiáticos que no te puedes perder

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Asia es el continente más grande y poblado del mundo. Por tanto, no es de extrañar que cada uno de los países asiáticos ofrezca una combinación única de historia, cultura y paisajes. En este post, te damos a conocer 5 países asiáticos que debes conocer en tus próximas vacaciones.

Sri Lanka: naturaleza, cultura y playas paradisíacas

Conocida como la “lágrima de la India” por su forma y ubicación, Sri Lanka (antigua Ceilán) es una isla repleta de historia y parajes espectaculares. Sus antiguas ciudades imperiales forman el llamado Triángulo Cultural, un circuito que recorre los imprescindibles del país. En él se pueden visitar la antigua fortaleza de Sigiriya, situada en la cima de una roca gigante, los templos budistas de Anuradhapura y las impresionantes cuevas de Dambulla, repletas de estatuas dedicadas a Buda.

Para los amantes de la naturaleza, el viaje en tren por las Tierras Altas ofrece vistas inigualables de plantaciones de té y montañas verdes. En cambio, si se busca sol y mar, las playas de Mirissa y Unawatuna son perfectas para practicar surf, uno de los reclamos turísticos más importantes de la isla.

Nepal, el más alto de los países asiáticos

Nepal es conocido por ser el país que alberga el Monte Everest, la montaña más alta del mundo. Pero más allá del alpinismo, este país tiene ciudades llenas de historia y espiritualidad. Es el caso de Katmandú, su capital. El valle en el que se encuentra es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 1979, ya que recoge 7 conjuntos de monumentos y edificios representativos de su historia y cultura.

Entre ellos se encuentran las tres plazas Durbar situadas frente a los palacios reales de Hanuman Dhoka en la capital, las ciudades de Patán y Bhaktapur; las estupas budistas de Swayambhu y Boudhanath; y los templos hinduistas de Pashupati y Changu Narayan.

La mejor gastronomía de los países asiáticos, en Vietnam

Vietnam tiene una geografía diversa que combina grandes ciudades con paisajes costeros y montañosos. Al norte, la tradicional Hanói es el centro político y cultural del país, mientras que Ho Chi Minh, al sur, representa el lado más moderno y cosmopolita del país. La bahía de Ha Long, situada en el golfo de Tonkín, es uno de los paisajes más emblemáticos de Vietnam. Se caracteriza por sus miles de formaciones rocosas de origen kárstico que emergen del agua.

Por supuesto, la gastronomía vietnamita es otro de sus grandes reclamos. Platos como el pho (sopa de fideos), el banh mi (bocadillo vietnamita) y los rollitos vietnamitas son imprescindibles. Cada región del país varía estos platos, adaptándolos a los recursos disponibles en cada una de ellas y a las tradiciones locales.

Camboya: el esplendor del Imperio Jemer

El principal atractivo de Camboya es el Parque Arqueológico de Angkor, un complejo de templos que fue el corazón del antiguo Imperio Jemer. Angkor Wat, la joya del conjunto, es el monumento religioso más grande del mundo y un lugar difícil de olvidar.

Pero Camboya tiene mucho más que ofrecer. En Phnom Penh, su capital, se puede conocer la historia reciente del país visitando el Museo del Genocidio Tuol Sleng y el los Campos de la Muerte de Choeung Ek.

La modernidad y tradición, combinadas en Singapur

Singapur es un destino que combina la modernidad con sus raíces culturales e históricas. Esta ciudad-estado es uno de los países más prósperos y alberga el puerto más activo del mundo. Su skyline está compuesto por imponentes rascacielos, entre los que destaca el icónico Marina Bay Sands, símbolo del desarrollo y la innovación del país.

Además, los barrios de Chinatown, Little India y Kampong Glam demuestran la diversidad y las influencias chinas, indias y malayas de la ciudad a través de su arquitectura y gastronomía.

Recuerda

Cada país asiático ofrece una combinación única de historia, cultura y paisajes.
Nepal, además de albergar el Monte Everest, también está repleto de ciudades llenas de historia y espiritualidad.
La bahía de Ha Long, en Vietnam, se caracteriza por sus miles de formaciones rocosas de origen kárstico que emergen del agua.