Cuidar el planeta es una responsabilidad que recae en todos sus habitantes. Los problemas globales, como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad o la contaminación parecen inabordables desde una perspectiva individual.
Sin embargo, los pequeños cambios en nuestros hábitos diarios pueden generar un impacto más grande del que creemos para el medioambiente. En este artículo te proponemos 5 hábitos que puedes adoptar para formar parte del cambio.
Prioriza el transporte sostenible
Según un informe de UNICEF, la contaminación del aire se ha convertido en el segundo factor de riesgo de muerte en el mundo. En este sentido, el transporte que funciona por combustibles fósiles es una de las principales fuentes de emisión de gases de efecto invernadero que contaminan la atmósfera. Cambiar el coche por opciones más sostenibles, como usar el transporte público o la bicicleta, ayuda a reducir las emisiones y mejora la calidad del aire que respiramos.
Consume alimentos locales y de temporada
Nuestra alimentación tiene un impacto directo sobre el medio ambiente. Los productos que no son de temporada suelen requerir transporte de largas distancias, almacenamiento y métodos intensivos de producción, lo que incrementa considerablemente su huella de carbono. Al optar por alimentos locales y de temporada, reducimos estas emisiones y apoyamos a los productores locales.
Apuesta por la energía sostenible para cuidar el planeta
La transición hacia energías renovables es esencial para combatir el cambio climático y proteger el planeta. Actualmente, existen comercializadoras de energía que ofrecen exclusivamente electricidad proveniente de fuentes renovables, como la solar, la eólica o la hidráulica. En este sentido, puede ser interesante investigar y cambiar de compañía de cara a que nuestro consumo energético sea más respetuoso con el medio ambiente.
Participa en la economía circular
La economía circular se basa en la regla de las 3R: reducir, reutilizar y reciclar. Cada vez que reducimos nuestro consumo, evitamos la extracción de recursos naturales y disminuimos la generación de residuos. Es tan sencillo como llevar tu propia bolsa al supermercado, elegir productos con menos embalaje u optar por envases reutilizables.
Por otro lado, dar una segunda vida a objetos como ropa, muebles o dispositivos electrónicos alargará su ciclo de vida útil y reducirá la necesidad de producir nuevos artículos.
Cuidar el planeta usando el agua de manera consciente
El agua potable es uno de los recursos más valiosos de nuestro planeta, pero también uno de los más escasos. Estas son algunas medidas prácticas para ahorrarla:
- Cerrar el grifo mientras te cepillas los dientes.
- Arreglar las fugas de agua en grifos y tuberías.
- Optar por duchas en lugar de baños.
- Instalar dispositivos economizadores de agua en duchas y grifos.
- Usar electrodomésticos eficientes en el consumo de agua.
Cuidar del planeta es un acto de responsabilidad compartida que trasciende generaciones. Con estos pequeños gestos cotidianos, podemos generar un gran impacto positivo y construir un futuro mejor para todos.