¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los límites del planeta? Sabemos que la capacidad de la Tierra para sostener la vida humana y sus ecosistemas es finita. En nuestro afán por desarrollar y crecer como sociedad, hemos contribuido a degradar los recursos y las condiciones ambientales de nuestro planeta, pero, ¿hasta qué punto podemos llegar?
En este sentido, los límites del planeta son un marco conceptual que evalúa el estado de 9 procesos fundamentales que regulan la estabilidad y resistencia del planeta Tierra. Dentro de ellos, la humanidad puede seguir desarrollándose y prosperando, pero ¿y si los sobrepasamos?
¿Qué sucede si se exceden los límites del planeta?
Cuando los límites se sobrepasan, pueden desencadenarse cambios drásticos e irreversibles en el clima y los ecosistemas, aunque no sucederán de la noche a la mañana. Estos límites funcionan como alarmas que nos indican que estamos acercándonos peligrosamente a niveles insostenibles de degradación ambiental. Juntos, marcan un umbral crítico de riesgos para las personas y los ecosistemas de los que formamos parte.
Los 9 límites del planeta
El concepto de los límites del planeta fue desarrollado en 2009 por un grupo de 28 científicos de renombre liderados por Johan Rockström, del Resilience Centrede Estocolmo; y Will Steffen, de la Universidad Nacional de Australia. Identificaron los siguientes 9 procesos que regulan la estabilidad del planeta:
- Cambio climático: se refiere al aumento de gases de efecto invernadero en la atmósfera, especialmente el dióxido de carbono, que provocan el calentamiento global y alteraciones climáticas extremas.
- Pérdida de biodiversidad: evalúa la extinción de especies y la reducción de la diversidad genética, que afectan a la resiliencia de los ecosistemas.
- Ciclos de nitrógeno y fósforo: cada elemento tiene un ciclo natural que describe cómo circula, se transforma y se recicla en los ecosistemas. Así, este parámetro mide la alteración de esos los ciclos globales del nitrógeno y el fósforo, componentes básicos de los organismos vivos.
- Uso del suelo: la conversión de tierras naturales para la agricultura y la urbanización reduce la capacidad del planeta para sostener la vida silvestre y regular el clima.
- Acidificación de los océanos: el aumento de dióxido de carbono disuelto en los océanos provoca su alcalinización, afectando la vida marina, especialmente los corales y moluscos. En este sentido, nos encontramos dentro del rango seguro de acidificación de los océanos, pero por poco.
- Cambio del agua dulce: se evalúa la alteración de los flujos naturales de agua azul (superficial y subterránea) y verde (agua disponible para las plantas).
- Agotamiento del ozono estratosférico: la disminución del ozono estratosférico, que nos protege de la radiación ultravioleta, daña los ecosistemas. Desde que en los años 80 los gobiernos tomaran medidas para reducir el agujero de la capa de ozono, se ha ido restaurando y es uno de los parámetros más positivos.
- Carga de aerosoles atmosféricos: este indicador se refiere a la contaminación atmosférica que afecta al clima y a los patrones de precipitaciones.
- Contaminación por productos químicos noveles: este límite delimita el vertido de sustancias como plásticos, pesticidas y otros químicos sintéticos, que pueden tener efectos tóxicos persistentes en el medio ambiente y la salud humana.
Cada uno de estos límites tiene umbrales específicos definidos. Si se cruzan, significa que se supera la capacidad de autorregulación de la Tierra y se compromete la habitabilidad del planeta.
La urgencia de actuar
En septiembre de 2023, un equipo de científicos concluyó que se han sobrepasado 6 de estos 9 límites. Esto representa una grave amenaza para la estabilidad del planeta. La superación de estos límites no implica cambios inmediatos, pero sí incrementa el riesgo de eventos catastróficos a gran escala.
Las políticas y prácticas deben enfocarse no solo en el cambio climático, sino también en la interrelación de todos los límites. Por ello, es necesario que gobiernos, empresas y ciudadanos actuemos ahora para garantizar un futuro sostenible.